La costa teresina se caracteriza por sus numerosas calas, entrantes y promontorios que esconden playas bañadas por un mar cristalino y fondos riquísimos. A la mayor parte de las playas, excepto la Rena Bianca, que se encuentra a dos minutos a pie del centro del pueblo, se llega en 10/15 minutos de coche y solo algunas de ellas son accesibles solo a pie o en barca.
La mayor parte de las playas está dotada de los servicios esenciales como quioscos bar, servicios higiénicos, alquiler de sombrillas, tumbonas, canoas y barcas a pedales.